Alimentación y actividad física, la ‘receta’ perfecta para niños con diabetes

¿Qué alimentación debo dar a mi hijo si tiene diabetes? ¿Podrá comer de todo? ¿Es bueno que practique ejercicio físico? ¿Cómo influirá el deporte en sus niveles de glucosa? Todas estas preguntas son algunas de las que seguro os habéis hecho los padres de los pequeños con diabetes nada más recibir el diagnóstico. Es importante que sepáis que una nutrición equilibrada y la práctica de actividad física conforman un buen tándem para que tu hijo pueda hacer vida normal.

La combinación de una buena alimentación con una vida física activa es beneficiosa para todas las personas, pero lo es aún más para los niños y adolescentes con diabetes. Los menores que padecen esta enfermedad necesitan equilibrar la ingesta de hidratos de carbono, con la insulina que se inyectan y el ejercicio o deporte que practican para mantener su concentración de azúcar en sangre bajo control. Consulta con su médico o nutricionista todas tus dudas porque son estos profesionales sanitarios los que pueden pautar mejor la alimentación de tu hijo.

¿Qué puede comer?

Lo primero que tienes que saber si eres padre o madre de un pequeño con diabetes es que tu hijo no tiene por qué seguir una dieta especial. Puede comer de todo, pero necesita con un poco más atención al cuándo y al cuánto. Tu pequeño podrá disfrutar de sus alimentos preferidos, pero es posible que tenga que hacerlo en porciones más pequeñas y con menos frecuencia.

La clave para mantener a raya la enfermedad es consumir alimentos saludables, exactamente igual que si no tuviéramos diabetes. Así, debes incluir en su plan de nutrición verduras, frutas, cereales integrales y proteínas de carnes magras como el pollo o pavo, pescado, huevos y frutos secos. También puedes aportarle lácteos como leche, yogures y quesos bajos en grasa. Los alimentos que tienes que limitarle a tu hijo son aquellos con alto contenido en sal, los dulces y helados y las bebidas con azúcares añadidos como los refrescos.

Recuerda que es necesario combinar nutrición y ejercicio físico. La actividad es fundamental porque reducirá sus niveles de glucosa en sangre, bajará su presión arterial y le ayudará a dormir bien y a mantenerse en su peso idóneo.  

Si tu hijo tiene diabetes, debes saber que puede practicar  cualquier tipo de ejercicio pero, de acuerdo con su duración o intensidad, la actividad puede afectar a sus niveles de azúcar en sangre. Por eso, lo ideal es una combinación de ejercicios aeróbicos, que promueven mayor consumo de glucosa, con los anaeróbicos, que requieren un consumo menor. Consulta con su médico antes de que comience a hacer deporte. Como ves, la receta es bastante sencilla. Nutrición y ejercicio, el cóctel perfecto para que tu hijo disfrute de la vida sin miedo a la diabetes.