Hipertensión: Aprende a mantener a raya tu colesterol

Seguro que más de una vez has visto un anuncio que advierte de los riesgos asociados al colesterol.  Y seguro que conoces más de una marca de productos destinados a combatirlo. Ante este panorama, es inevitable entender el colesterol como algo negativo.

Sin embargo, el colesterol no es malo. O al menos no merece la mala fama que le precede. Su existencia resulta fundamental para que nuestro organismo funcione correctamente, pues aporta fluidez a nuestras membranas y produce ciertas vitaminas y hormonas muy necesarias para nuestra salud. Por otra parte, sí es cierto que su exceso conlleva problemas de tránsito en la sangre que pueden llegar a obstruir las arterias. Cuando esto sucede, el suministro de oxígeno y el flujo sanguíneo se ven interrumpidos, o se forman coágulos que pueden llegar a causar anginas de pecho o infartos de miocardio.

Las dificultades pueden ser mayores en los casos en los que el colesterol se combina con la hipertensión. La presencia excesiva de colesterol malo en nuestro cuerpo incrementa de manera gradual el riesgo vascular de las personas hipertensas y contribuye al desarrollo de la hipertensión arterial. La celebración del Día Mundial del Colesterol (19 de septiembre) puede ser una oportunidad estupenda para que te decidas a informarte y ver qué puedes hacer para evitar padecerlo.

Colesterol e hipertensión van muchas veces de la mano ya que comparten las mismas causas que los provocan. Por ejemplo, el tabaco y el consumo de alcohol son dos de los principales causantes, junto con una alimentación errónea (alimentos procesados y grasos).

Al hablar de estas patologías es normal pensar en una persona obesa. Si engordas solamente entre 2 y 3 kilos tu presión arterial se verá afectada sobre manera. Y es que la obesidad es una de las principales causas de resistencia relativa a la medicación antihipertensiva. Por ello es recomendable comenzar a practicar algún ejercicio físico.

Seguro que, si sigues las siguientes recomendaciones, mantendrás controlado tu colesterol: aumenta el consumo de frutas y verduras hasta llegar a cinco raciones diarias; sustituye las carnes rojas por carnes blancas con menos grasa; huye de los alimentos precocinados, de la bollería industrial, de las grasas saturadas y no abuses de los fritos; cocina con aceite de oliva y evita la margarina y la mantequilla; disminuye el consumo de sal y de bebidas azucaradas como refrescos, y haz ejercicio físico de forma rutinaria, de 30 a 60 minutos al día siempre que puedas.

Así pues, siguiendo estos pequeños consejos, te será más sencillo dar la espalda al colesterol malo y mantener a raya la hipertensión. El día 19 de septiembre, ¡decídete a vivir de forma saludable!