COLESTEROL - 20 de febrero de 2025
El colesterol es una sustancia grasa que se encuentra en cada célula de nuestro cuerpo. Es fundamental para la formación de nuestras membranas celulares, para la síntesis de hormonas, como testosterona, estrógeno, cortisol y otras, para la producción de bilis, para la digestión de alimentos grasos, para la formación de mielina (vaina que recubre los nervios), para metabolizar algunas vitaminas (A, D, E y K), etc.
Como es una sustancia grasa, el colesterol no se disuelve en la sangre. Entonces, para viajar por el torrente sanguíneo y llegar a los tejidos periféricos, el colesterol necesita un portador. El portador es por lo que se habla de tipos de colesterol.
Mientras el colesterol LDL y VLDL llevan el colesterol a las células y facilitan la deposición de grasa en los vasos, el HDL hace lo contrario, promueve la eliminación del exceso de colesterol, inclusive de las placas arteriales. Por lo tanto, llamamos al HDL «colesterol bueno» y al VLDL y LDL «colesterol malo»1.
Tener demasiado colesterol en la sangre aumenta el riesgo de enfermedad de las arterias coronarias2.
La dislipidemia hace referencia al aumento de la concentración plasmática de colesterol y lípidos en la sangre. Este exceso de colesterol malo está relacionado con el riesgo de enfermedades como la aterosclerosis, la hipertensión arterial y el infarto3.
El ojo, y en concreto la retina, está muy vascularizado, es decir a su interior llegan arterias y vasos capilares que, además, son muy estrechos, por lo que cualquier anomalía en la circulación de la sangre, por pequeña que sea, puede afectar en mayor o menor medida a la visión. Así, el colesterol puede provocar:
Disminución de la calidad de la visión cromática por fallos en la corteza cerebral que concentra la función visual y deriva en una pérdida progresiva de la capacidad para diferenciar los colores.
Bloqueo del flujo sanguíneo de la zona ocular. El problema de visión más grave asociado a la acumulación excesiva de colesterol en las paredes de los vasos sanguíneos. Puede derivar en pérdida temporal de visión (amaurosis fugaz) o pérdida total e irreversible de la vista si la oclusión tiene lugar en la arteria central de la retina.
Signos estéticos. Depósitos de colesterol en la piel, alrededor de los ojos o en la córnea que, aunque no suelen provocar problemas de visión, suponen un problema de carácter estético para algunas personas4.
CONCLUSIONES
Somos bombardeados diariamente con informaciones de todo tipo sobre el colesterol. Siglas y valores son frecuentemente disparados sobre los pacientes sin que reciban mínimas orientaciones para poder aprovechar tanta información disponible. Acabamos utilizando los términos colesterol bueno y colesterol malo como simplificación para que el tema sea más fácil de entender para los no expertos, pero sigue haciendo falta explicar qué suponen.
Es importante estar informado sobre los riesgos y comprobar, mantener y controlar. Es decir:
Compruebe sus niveles de colesterol frecuentemente. Es fundamental conocer sus cifras y evaluar su riesgo.
Llevar una dieta y estilo de vida para ayudar a mantener adecuados sus niveles de colesterol.
Controlar su colesterol con la ayuda de su profesional sanitario si es necesario5.
Bibliografía consultada:
Fundación Española del corazón- Colesterol y riesgo cardiovascular
NIH MedlinePlus Magazine- Colesterol ¿Es bueno o malo?
MeviacoverHospitals- Qué es la dislipidemia: causas, síntomas, tratamiento
Instituto Oftalmológico Tres Torres-¿Afecta el colesterol alto a la visión? - IOTT
American Heart Association-WhatisCholesterol?
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