COLESTEROL - 15 de febrero de 2024
Cuando hablamos de colesterol y omegas, solemos pensar en el omega 3 y su papel tanto de prevención como intervención en la mejora cardiovascular y el perfil lipídico (colesterol, HDL, LDL, triglicéridos…). Pero lo que debemos saber es que no existe sólo el omega 3 sino también el 6 y el 9.
Los omegas 3, 6 y 9 son un grupo de grasas insaturadas con ácidos grasos mono y poliinsaturados. Se encuentran en los siguientes alimentos fundamentalmente:
Respecto al omega 3, los principales AG (ácidos grasos) son el ácido alfa linolénico (ALA), el ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA). El organismo puede convertir pequeñas cantidades de ALA en EPA y DHA. Todos ellos son esenciales, es decir, es necesario incorporarlos a través de la alimentación. Según la EFSA, las necesidades para un adulto medio son de 250mg diarios para mantener una adecuada salud cardiovascular en adultos sanos.
En cuanto al omega 6, en los que encontramos el ácido linoleico y el ácido araquidónico. Son ácidos grasos esenciales importantes ya que regulan el metabolismo y la salud ósea, pero es fundamental mantener un equilibrio entre el omega 3 y este para unos niveles de colesterol saludables.
Y, por último, el omega 9, los ácidos grasos más olvidados pero que también tienen un rol importante en nuestra salud cardiovascular y colesterol ya que aumentan el HDL y reduce el LDL. Son los ácidos oleico y erúcico, no son esenciales, por lo que no son imprescindibles a través de la dieta.
Como dato final, añadir que sólo el 15% de nuestro colesterol es modificable con la alimentación. No es malo ya que tiene funciones imprescindibles para el cuerpo: participa en las membranas de las células, forma las sales biliares... La clave reside en mantener un nivel adecuado de él y de los otros parámetros cardiovasculares.
Redactado por:
Mireia Elías Fernández
Dietista-Nutricionista Col.MAD00190 y fundadora de Alimentación 3S.