VIDA SALUDABLE - 30 de octubre de 2020
Trabajar la elasticidad es una actividad que no siempre se practica correctamente y que resulta tanto o más importante que realizar un buen calentamiento durante la práctica de ejercicio físico. En la situación que vivimos actualmente por la alerta sanitaria que ha provocado el coronavirus, esta práctica se ha vuelto más importante que nunca para evitar el entumecimiento de los músculos y lesiones se vaya a practicar algún deporte o no.
Antes del confinamiento ya lo recomendaban los expertos, pero ahora es de vital importancia imponerse una rutina de estiramientos cada mañana, que no te quitarán más de cinco minutos y te librarán del entumecimiento muscular, además de mejorar la movilidad de tus articulaciones y ayudarte a empezar el día con energía.
Durante estas semanas el sedentarismo está más a la orden del día que nunca, por ello dedicar unos minutos al día a los estiramientos es una rutina más que aconsejable, obligatoria.
Además, es una práctica física que no entiende de edad y es importante independientemente de la etapa de la vida en la que te encuentres: durante la infancia, los niños deben hacer estiramientos para que su musculatura se desarrolle a la misma vez que su crecimiento óseo. En la adolescencia y la juventud el crecimiento ha cesado, pero la elasticidad sirve para reducir y evitar las lesiones y mitigar el impacto de los choques. En una edad más adulta, la elasticidad es básica para que no se sobrecarguen las articulaciones y el sistema locomotor funcione como debe. Y las personas mayores deben trabajar su elasticidad porque es necesario para un envejecimiento saludable que evite la aparición de enfermedades óseas y musculares, ya que los tejidos se van volviendo rígidos y reciben menos nutrientes.
Trabajar la flexibilidad trae consigo múltiples beneficios para tu salud que se pueden resumir en los cinco que te presentamos a continuación:
Redactado por:
Conectando Pacientes