VIDA SALUDABLE - 12 de noviembre de 2020
Hace unos meses empecé a tomar avena de forma regular y ya no puedo vivir sin ella. Un compañero de trabajo me habló de los beneficios que tenía para la salud y sobre todo de lo rica que estaba, así que fui a comprar y empecé a incluirla en mis desayunos. No sé si conocéis los beneficios de la avena, seguro que muchos de vosotros la tomáis de forma habitual, pero seguro que también otros muchos no habéis dado ese paso y necesitáis un empujoncito para incluir este alimento tan saludable en vuestra dieta.
Se trata de un alimento muy nutritivo que tiene un gran poder saciante. Es una fuente de carbohidratos de absorción lenta por lo que nos mantendrá sin hambre y evitará que piquemos entre horas.
La avena está especialmente indicada en personas que sufren estreñimiento debido a su alto contenido en fibra, eso sí, no olvidéis beber agua a lo largo del día para que la fibra pueda cumplir su función. Además, la avena mejora el tránsito intestinal y ayuda a digerir los alimentos porque alimenta las bacterias buenas del organismo.
La avena contiene beta glucano una fibra que ayuda a bajar los niveles de colesterol “malo” y los triglicéridos en la sangre.
Es una gran fuente de fibra y por tanto ayuda a reducir la absorción de azúcar en el intestino y bajar los niveles de azúcar en sangre, lo que la convierte en una gran aliada para los diabéticos.
Si queréis empezar a incluir la avena en vuestro día a día, aquí van algunas recetas muy sencillas para evitar la pereza y poder disfrutar de este cereal tan beneficioso para nuestra salud.
Avena con leche, plátano, fresas y canela:
Este es el más sencillo, yo lo hago mucho, sobre todo en épocas en las que necesito un aporte extra de energía y también cuando necesito regular mi tránsito intestinal.
Yogur natural con avena, kiwi, mandarina, chía y arándanos
Este rico desayuno o merienda se elabora en unos minutos y está riquísimo.
Redactado por:
Cristina Lucerón