VIDA SALUDABLE - 17 de agosto de 2023
La higiene bucal es fundamental para mantener una boca sana y prevenir problemas periodontales. Aunque el cepillado es esencial, no puede eliminar por completo la placa bacteriana y los residuos de alimentos que se acumulan entre los dientes y a lo largo de las encías, por lo que se corre el riesgo de desarrollar problemas bucodentales, como caries, enfermedades de las encías, mal aliento e incluso enfermedades periodontales más graves, como la gingivitis y la periodontitis. Es por ello que el uso del hilo dental es esencial para obtener una mayor limpieza en áreas de difícil acceso.
El hilo dental, también conocido como seda dental, es un filamento delgado y flexible de nylon o plástico. Su uso se recomienda a todas las personas en su rutina de higiene bucal diaria, independientemente de su edad. A partir de los 4 años, los niños pueden comenzar a utilizarlo con la supervisión de un adulto, y a partir de los 8 años, pueden hacerlo por sí mismos una vez que hayan aprendido cómo hacerlo.
El hilo dental no debe utilizarse únicamente cuando hay espacios grandes entre los dientes, sino que es igual de necesario en espacios interdentales estrechos, ya que la placa bacteriana puede acumularse en cualquier hueco. El hilo dental debe usarse al menos una vez al día, preferiblemente antes de acostarse. Durante la noche, se produce una menor producción de saliva, lo que puede favorecer la acumulación de bacterias en la boca. A continuación, os damos los pasos básicos para un uso correcto del hilo dental:
Consulta a tu odontólogo para obtener más información y el tipo de hilo dental más adecuado a tus necesidades. Incorporar el hilo dental en tu rutina diaria te ayudará a lograr una salud bucal inmejorable y a disfrutar de una sonrisa libre de problemas.
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