La congelación es una forma excelente de conservar los alimentos, permitiéndonos alargar su vida útil, mantener sus propiedades nutricionales y, en muchos casos, garantizar la seguridad alimentaria. En este artículo, vamos a explicar las ventajas de congelar los alimentos, cómo podemos hacerlo de manera segura, qué alimentos son aptos para la congelación, cuánto tiempo pueden permanecer dentro del congelador y os ofreceremos diferentes recomendaciones para descongelarlos adecuadamente.
La congelación de alimentos presenta numerosas ventajas, entre las cuales destacan:
- Conservación de nutrientes: La congelación preserva los nutrientes de los alimentos, ya que detiene el desarrollo de microorganismos y evita la pérdida de vitaminas y minerales.
- Reducción del desperdicio: Podemos aprovechar aquellos ingredientes que no van a ser consumidos inmediatamente congelándolos y evitando así tener que tirar comida.
- Mayor variedad de alimentos: Al tener alimentos congelados, podemos disfrutar de una mayor variedad de ingredientes en cualquier momento del año, independientemente de su temporada.
- Facilita la planificación de comidas: Podemos preparar comidas con antelación y tenerlas listas para su consumo en cualquier otro momento.
- Ahorro de tiempo y dinero: Podemos aprovechar ofertas y precios más bajos comprando productos en grandes cantidades y congelándolos, lo que nos permite ahorrar algo de dinero y tiempo.
Para congelar alimentos de manera segura y efectiva, es importante seguir ciertas recomendaciones:
- Protege los alimentos: Utiliza envases herméticos y bolsas para congelar, y etiquétalos con el nombre del alimento y la fecha de congelación. Es recomendable no introducir alimentos calientes directamente en el congelador, es mejor dejarlos enfriar primero en la nevera.
- Congelación rápida: Congela los alimentos lo más rápidamente posible para preservar sus propiedades nutricionales. Los alimentos ya envasados no deben sobrepasar la fecha de caducidad o consumo preferente. Es preferible utilizar un congelador de cuatro estrellas, que alcance temperaturas de -18 ºC o inferiores, para asegurar una congelación óptima.
- Porciones individuales: Divide la comida en raciones individuales para una congelación más rápida y reducir el desperdicio.
- No Recongelar: Evita recongelar alimentos que ya han sido descongelados, salvo que se cocinen a más de 70ºC durante al menos dos minutos.
La congelación es adecuada para una amplia variedad de alimentos, pero existen otros que no deben ser congelados.
CONGELAR
- Carnes
- Pescados y mariscos
- Verduras y legumbres
- Frutas
- Huevos batidos
- Pan
- Fiambres y embutidos
NO CONGELAR
- Verduras de ensalada
- Huevos con cáscara
- Patatas
- Alimentos fritos
- Alimentos con alto contenido en grasa
- Frutas con alto contenido de agua
- Lácteos y productos frescos
Una congelación adecuada mantiene los alimentos seguros por tiempo indefinido, pero se recomiendan los siguientes tiempos de almacenamiento por motivos de calidad:
- Frutas y verduras: entre 8 y 12 meses.
- Carnes de vacuno, cordero y cerdo: entre 6 y 12 meses.
- Carnes de pollo: entre 9 y 12 meses.
- Carne picada, hamburguesas: entre 3 y 4 meses.
- Fiambres y embutidos: entre 1 y 2 meses.
- Claras y yemas de huevo crudas (sin cáscara): 12 meses.
- Pescado blanco: entre 6 y 8 meses.
- Pescado azul: entre 2 y 3 meses.
- Marisco: entre 3 y 6 meses.
- Sopas y guisos: entre 2 y 3 meses.
Saber descongelar adecuadamente los alimentos es crucial para mantener la seguridad alimentaria en casa. El mejor método siempre es descongelar en la nevera, colocando el alimento sobre un plato o bandeja para recoger el líquido que se desprenda hasta que alcance una temperatura adecuada. La mayor parte de los microondas tienen un programa para descongelar alimentos, si no se puede utilizar la potencia más baja, cortar los alimentos en trozos pequeños y removerlos durante el proceso. Por otro lado, algunos alimentos pueden cocinarse congelados directamente, pero siempre siguiendo las indicaciones del etiquetado.
Al seguir las recomendaciones adecuadas, podemos disfrutar de alimentos congelados de manera segura y mantener su calidad nutricional. Aprovechemos nuestro congelador como una herramienta útil para una alimentación más conveniente y sostenible.
Fuentes: