¿Cómo prevenir el anisakis estas Navidades?

El pescado y el marisco son, junto con el cordero y el cochinillo, los alimentos más típicos y consumidos en España durante la Navidad, sin embargo, con los dos primeros hay que tener cierto cuidado para evitar que el anisakis nos amargue las fiestas.

El anisakis es un parásito que podemos encontrar en la zona de los intestinos de los pescados de mar, en crustáceos como las cigalas, y en cefalópodos como el pulpo o el calamar. Puede llegar a parasitarnos si se consume un ejemplar de pescado o de marisco contaminado que no ha sido convenientemente limpiado, congelado o cocinado a suficiente temperatura como para que el parásito muera antes de que lo tomemos.

Este microorganismo hizo su primera aparición en España a finales de los años 80, pero no hace tantos años que se promulgó una legislación a nivel europeo y español para prevenirlo. Se llevó a cabo coincidiendo con una oleada de casos de anisakiasis, la enfermedad que produce.

Según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), hasta el 36% del pescado que se consume en España, contiene en su interior anisakis. Por ello, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición emplea todos sus esfuerzos en que la patología no se siga extendiendo entre la población y ha elaborado un plan de prevención y concienciación para que sepamos identificar al parásito, cuando se puede ver a simple vista, y actuar correctamente si tenemos sospechas de habernos contaminado.

No conviene alarmarse por el hecho de que el pescado que encontramos en la pescadería esté infectado por este parásito, es legal, por lo que no entraña un riesgo grave para la salud pública, y no quiere decir que necesariamente vayamos a ser parasitados si lo consumimos. Simplemente hay que tener cuidado y seguir los consejos de los expertos.

Para evitar que este minúsculo gusano te fastidie los días de celebración, basta con seguir las siguientes recomendaciones:

• Compra el pescado ya limpio y sin vísceras. Si no, límpialo cuanto antes porque, al morir el pez, el anisakis se traslada a los músculos y forma un quiste.
• A la hora de cocinarlo, ya sea cocido, frito, a la plancha o al horno, tienes que hacer que el propio pez o marisco, no solo el agua, en el caso de que lo cuezas, alcance los 60ºC durante al menos un minuto.
• Si optas por consumirlo crudo en un tartar o en forma de sushi o sashimi, deberás: o bien, comprarlo congelado, o congelarlo en tu frigorífico a una temperatura igual o inferior a -20ºC durante cinco días.
• Como siempre, la abstención es la única forma de conseguir un riesgo cero. Para ello, puedes elegir pescados de río y moluscos bivalvos en los que no anida el anisakis o directamente optar por otro tipo de manjares navideños.

Pero recuerda siempre que, asumiendo las debidas precauciones, no tienes por qué renunciar al sabor del pescado estas navidades.