Tips nutricionales para comidas y cenas pre y post navideñas

Entre que el frío llega cada vez más tarde por el cambio climático y los turrones aparecen cada vez antes, en unos años estaremos comiendo polvorones en bañador. Y es que esta es la gran realidad que vivimos en esta etapa y una de las dificultades que presenta. La alimentación va más allá de calorías y nutrientes, también deberíamos tener en cuenta la gastronomía, tradiciones, cultura, religión, contextos, compañías… Es por esto por lo que en la etapa navideña la elección de alimentos consideramos que debería hacerse desde ahí.

Poniendo foco siempre en SALUD y no en compensar calorías o perder peso antes o después de las fiestas, hay ciertos consejos que nos pueden ayudar en esta etapa. Pondremos objetivos como los siguientes: mejorar la inflamación, bajar la hinchazón abdominal, reducir la retención de líquidos, potenciar la hidratación, aumentar la densidad de nutrientes, escoger fuentes alimenticias de fácil digestión, disfrutar sin culpas, equilibrar y evitar extremos. Por lo tanto, es recomendable elegir y evitar los siguientes grupos de alimentos en tomas como el desayuno y comida del 24 o del 31, la cena del 25 o del día 1…

¿QUÉ TOMAR DESPUÉS DE UNA COMIDA COPIOSA?

• Caldos y cremas de verduras.
• Mucha agua.
• Infusiones digestivas como manzanilla e hinojo o drenantes.
• Piezas de frutas.
• Lácteos naturales.
• Proteínas de fácil digestión: huevos, el pollo del caldo, pescados blancos.
• Tubérculos como la patata o boniato.

¿QUÉ EVITAR DESPUÉS DE UNA COMIDA COPIOSA?

• Legumbres (o tomarlas en hummus o trituradas).
• Carnes grasas, rojas o embutidos.
• Zumos de frutas.
• Cereales refinados.
• Ultraprocesados.

Queremos proponerte disfrutar de los alimentos y comidas típicas de esta etapa en los días festivos, comidas y cenas de amigos o de empresa y el resto de los días al igual que a la vuelta de Reyes mantener tu pauta habitual. No es necesario compensar, contar calorías, hacer uso de la báscula, saltarse comidas o hacer algún détox. Lo que funciona es retomar hábitos de forma gradual y sólida. Prestar atención a otros pilares importantes como el autocuidado, hidratación, movimiento, descanso, gestión emocional, entre otros.

Aprovecha a cocinar con amigos y familiares o incluir a los más pequeños. Hacer menús navideños más saludables introduciendo en todo el formato de entrantes, primeros y segundos platos, postres y bebidas alguna opción más rica en nutrientes intercalándola con el resto. Te dejamos algunas ideas: patés de frutos secos como castañas, salpicón de marisco, bandejas, cremas de verduras, pasteles de verduras o pescados, guarniciones de verduras, postres como trufas caseras o turrón con chocolate negro y frutos secos, entre otros.

Evitar pensamientos radicales, extremos, cortoplacistas y reduccionistas donde nos mandamos mensajes como “total como ya he comido 3 polvorones, por unos cuantos más da lo mismo” o “Debo compensar los excesos de las Navidades”. En nutrición, nada es blanco o negro. Cuida tu salud de forma integral y notarás ese bienestar.

Más información en Alimentación 3S.