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Por qué es más peligrosa la hipertensión arterial por la noche

HIPERTENSIÓN - 23 de diciembre de 2022

Al igual que nuestro estado de ánimo no es el mismo a lo largo del día, tampoco lo es nuestra tensión arterial. La revista médica European Heart Journal ha publicado recientemente un estudio en el que se ha controlado la tensión de 18.000 personas. El estudio ha concluido que el riesgo de tener la tensión alta por la noche es mayor y, por ende, existe un mayor riesgo de padecer un ataque al corazón o un ictus.

Por esta razón, el estudio aconseja tomar la medicación justo antes de irse a dormir. Sin embargo, es preciso destacar que este último consejo suscita cierta disparidad: según el ensayo realizado por la Fundación Británica del Corazón y apoyado por la Sociedad Británica e Irlandesa de Hipertensión y el Instituto Nacional para la Investigación de la Salud y la Atención en el Reino Unido, determinó que tomar por la mañana la medicación para la hipertensión es igual de eficaz que hacerlo por la noche. Sin embargo, la mejor hora para tratarse dependerá de las condiciones propias de cada paciente. Para poder ajustar la hora de ingesta del medicamento, se ha de medir de forma regular la presión. Durante la medición de la tensión, la revista médica resalta que existen múltiples circunstancias que alteran los resultados, por ejemplo:

  • Fumar o ir al baño justo antes de realizar las mediciones.
  • Ingerir sustancias excitantes como chocolate, café o té.
  • Algunas personas se ponen nerviosas estando frente a un médico, hecho que altera los resultados.
  • La hora del día en el que se realice la prueba.

Si las pruebas se realizan bajo alguna de estas circunstancias los resultados serán incongruentes y habrán de repetirse las mediciones.

A pesar de las distintas opiniones sobre la hora a la que se debe tomar la medicación, lo que es incuestionable es que la presión arterial varia a lo largo del día. Por la noche, lo que se ha de controlar es que los parámetros no sean altos para lo que se considera durante esas horas. Es decir, lo habitual es que la presión arterial por la noche baje puesto que se está calmado y por ello los valores de presión nocturnos no habrían de superar los 120-80 y durante el día 135-85. Es preciso señalar que estos parámetros varían en función del sexo. En el caso de las mujeres, estas tienden a presentar unos niveles más bajos. Además, otros factores como la ansiedad, el ruido, la luz, padecer depresión… alteran la calidad del sueño, pudiendo desarrollar trastornos del sueño. Los expertos matizan que sufrir insomnio, parasomnias o hipersomnia se relaciona con un peor pronóstico evolutivo en pacientes con ictus, siendo los trastornos del sueño uno de los principales desencadenantes de tener la tensión alta por la noche.

Para reducir el riesgo de sufrir un accidente cardiovascular, ya sea de noche o de día, es importante llevar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente, reducir el estrés, descansar bien por la noche y, sobre todo, pedir y/o seguir las indicaciones de un profesional sanitario.

 

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