La salud de los pies en verano

Suelen ser los grandes olvidados, al menos hasta que dan problemas. Sin embargo, debemos saber que la buena salud de los pies es fundamental para conservar la salud del resto de nuestro cuerpo. Debemos tener en cuenta que los pies aguantan todo nuestro peso y es imprescindible su buena salud para tener una buena calidad de vida.

Los pies suelen ser los primeros que nos alertan de enfermedades como la diabetes, la gota o la artrosis, entre otras. En verano principalmente, coincidiendo con cuando solemos exponerlos, nos preocupan más nuestros pies y por eso he decidido compartir con vosotros algunos consejos que os ayudarán a mantener una buena salud pédica, tanto en verano como el resto del año.
Eso sí, no debemos olvidar que los pies pueden sufrir mucho más en verano, por el uso excesivo de chanclas y calzado abierto, las altas temperaturas y la humedad, así que debemos darles un cuidado extra.

Los expertos recomiendan no caminar descalzos en lugares públicos, para evitar contraer hongos, papilomas, heridas o sufrir resbalones.

Por el contrario, es muy beneficioso caminar descalzo por lugares aptos como césped, moqueta… con esto activarás la musculatura del pie.

Para hacer deporte es importante elegir un buen calzado dependiendo de la actividad. No es lo mismo correr que practicar zumba, caminar o ir en bici. Hoy en día las marcas deportivas cuentan con un gran catálogo dividido por disciplinas, para hacernos la vida más fácil.

Usa calzado adecuado cuya suela mida aproximadamente 4 centímetros y en cuanto al material, opta por fibras naturales y evita la goma para que los pies transpiren.

Intenta mantener los pies hidratados siempre, tanto con cremas especiales, como con cremas específicas, sobre todo si ya tenemos grietas o infecciones recurrentes.

Corta las uñas en recto, para evitar que se encarnen. Si tienes dudas, acude a un podólogo para que te muestre cómo se hace. Más allá de una cuestión estética, es muy importante mantener nuestra pedicura al día, para evitar problemas mayores y poder llevar una vida normal.

No abuses de los pintauñas, tanto los normales como los permanentes. Deja respirar las uñas sin esmaltes, de vez en cuando.

Lava los pies a diario y retira el exceso de humedad. Si aplicas una crema después de lavarlos, procura no calzarte hasta que el producto se haya absorbido.

Debemos visitar al podólogo una vez al año para que nos revise la pisada y evitar así posibles problemas de espalda, rodilla, cuello etc.
Normalmente solemos acordarnos del podólogo cuando ya tenemos un problema sin embargo, los expertos aseguran que en cuestión de salud pédica lo más recomendable es prevenir y eso solo se puede conseguir acudiendo al podólogo de forma regular.