Forma parte de nuestra rutina diaria, pero lo cierto es que existen ciertas conductas y costumbres que pueden perjudicar a tu salud sin darte cuenta. Toma nota de los siguientes ejemplos:
- Llevar tacones altos.
Calzar zapatos demasiado altos puede producir daños en los pies y en la espalda. De hecho, la aparición de juanetes, dedos de martillo, durezas, callos o ampollas se relaciona con este tipo de calzado que, además, también puede producir caídas, esguinces de tobillo, dolores en el tendón de Aquiles, artrosis de rodilla, problemas circulatorios que derivan en hinchazón de las piernas, retención de líquidos, varices…Y es que, al afectar a los pies, los zapatos de tacón pueden generar problemas en casi todo el sistema locomotor.
Los podólogos recomiendan usar tacones de media altura y preferiblemente con cuña y que estén bien sujetos tanto en el tobillo como en el antepié.
- Hacer un uso abusivo del teléfono móvil.
La forma de teclear y mirar la pantalla repetidamente puede hacer que se desarrolle artrosis en las manos y en el cuello. Es la llamada artrosis de las costureras, por adoptar la misma postura: trabajar con las manos y tener la cabeza agachada. Cuando este problema se agrava o se vuelve crónico, es necesario acudir a un especialista, ya que causa un trastorno caracterizado por rigidez, dolores de cuello y cefaleas derivadas de mantener la cabeza gacha y la parte superior de la espalda encorvada durante demasiado tiempo. Para evitarlo, hay que procurar leer con apoyo en la espalda y el cuello y poner el dispositivo a la altura de los ojos en lugar de bajar la cabeza.
- Cargar bolsos demasiado pesados.
Solemos cargar el bolso con cosas innecesarias que hace que pese demasiado, lo que puede convertirse en un perjuicio para el cuello, la espalda, los hombros y las manos. Los expertos aconsejan reducir el peso y optar por bolsos cruzados en vez de llevarlos al hombro o en la mano. Utilizar mochilas también es una buena opción, pero siempre con las hombreras ajustadas a la espalda.
- No adoptar la postura correcta en el trabajo.
Estar muchas horas sentado delante del ordenador usando el teclado y el ratón puede acarrear problemas en el túnel carpiano, una patología derivada de cambios hormonales asociados a la menopausia, o bien propia de trabajos manuales en los que se deben hacer movimientos repetitivos cogiendo instrumental y herramientas. Se traduce en sensación de acorchamiento, hormigueo y pérdida de sensibilidad en la mano.
Además, una mala postura de la espalda suele conllevar problemas en el cuello. La solución es usar sillas y ratones ergonómicos y hacer descansos para mover los dedos y hacer pequeños paseos para estirar la espalda. Además, se recomienda acudir a un fisioterapeuta si los síntomas no mejoran o se agravan
Aunque sea difícil, intenta tomar nota de estas recomendaciones para evitar posibles lesiones debido a nuestras rutinas diarias.