Comer por colores

Los colores de los alimentos esconden potentes beneficios para nuestra salud y aunque nunca hemos elaborado nuestros platos pensando en esta característica, quizá a partir de ahora debamos hacerlo para poder disfrutar de los múltiples beneficios que conlleva esta práctica.

A priori, el primer beneficio de comer por colores es hacer nuestro plato más vistoso y por tanto más apetecible, sin olvidarnos de que la variedad de colores implicará también una gran variedad de alimentos como la fruta y la verdura, que nos aportarán una gran cantidad de nutrientes y vitaminas.

VERDE

La clorofila es el ingrediente principal de los alimentos que lucen este color. Podemos encontrarlo en la lechuga, el brócoli, las espinacas…
Estos alimentos son ricos en ácido fólico, vitaminas C, E, B, K, minerales y antioxidantes.
El verde en la comida nos aportará fibra, por lo que se recomienda para regular el tránsito intestinal. También nos ayudará a reducir el colesterol y mejorar la salud del corazón. Estos alimentos son altamente depurativos y están especialmente recomendados en el embarazo, sobre todo alimentos como las espinacas, por su alto contenido en ácido fólico.

ROJO

El licopeno otorga este intenso color a los alimentos. Se trata de un caroteno con un alto poder antioxidante que inhibe las células cancerígenas.
Además, contienen minerales como el potasio y el selenio y vitaminas A, B9 y C. Estos alimentos son muy buenos para la memoria, refuerzan el sistema inmunológico, ayudan a la salud cardiovascular y a los problemas de circulación y mejoran el estado de ánimo.

Dentro de este grupo podemos destacar también los alimentos con un tono más granate como la granada o la remolacha. Estos son ricos en betacianina, esta sustancia es buena en los procesos degenerativos y de envejecimiento. Además, los alimentos granates son ricos también en vitaminas B6, C, E, hierro potasio y cobre.

NARANJA

Sin duda, lo primero que nos viene a la mente a la hora de pensar en alimentos naranjas es el betacaroteno, tan importante para cuidar nuestra piel, sobre todo en verano y para conseguir el bronceado saludable que muchos deseamos. El betacaroteno se transforma en vitamina A, la responsable de reparar tejidos, combatir infecciones y formar los huesos. Los alimentos de este color nos ayudan a proteger nuestra salud cardiovascular.

Pero además de esta sustancia, los alimentos naranjas también son ricos en vitamina C, potasio y bromuro. Y están especialmente recomendados para mejorar la salud de nuestra visión, sobre todo la retina.

BLANCO

Los alimentos de este grupo como el ajo, la cebolla o el puerro nos aportan fitoquímicos que ayudan a mantener la presión arterial baja, refuerzan el sistema inmunitario, combaten las infecciones, previenen la diabetes y mejoran la salud del sistema digestivo.

Además de estos grupos existen muchos más con los que podemos experimentar a la hora de construir nuestros platos. Eso sí, los expertos recomiendan incluir en la dieta también legumbres, alimentos de origen animal, cereales y frutos secos. Debemos llevar una dieta variada, pero sin olvidar incluir tantos colores como sea posible en nuestros platos, os animo a crear platos vistosos y llenos de salud.