Cada día está más presente en nuestra sociedad el concepto de autocuidado. Mantener un estilo de vida saludable, velar por la propia salud y tratar de mantener el cuerpo en forma y activo a través del ejercicio físico, son algunos de los objetivos que se plantean muchas personas hoy en día.
Una de las prácticas deportivas más extendidas en la sociedad es el running. A la hora de practicar este deporte, hemos escuchado muchísimas veces cientos de recomendaciones sobre horario, ritmo, calzado, terreno, alimentación y un largo etcétera. Aún así, cuando de practicar deporte se trata, lo mejor es hacerlo de una manera personal, es decir, hacerlo de manera correcta, pero del modo que más se adapte a nuestras necesidades.
Para que puedas practicar este deporte de la mejor manera y que más se adapte a ti, en este post vamos a desmentir algunos de los mitos más comunes en este deporte:
- Es mejor salir a correr por la mañana. Incorrecto, el marcar un horario siempre va a depender de nuestro gusto personal y de nuestra disponibilidad, por ello lo recomendable es realizarlo en el momento que nosotros queramos.
- Cuanto más sudas más adelgazas. Sudar más lo único que hace es que tu cuerpo pierde más agua y elimina toxinas, por tanto, es importante mantenerte hidratado.
- Si vas a competir, calienta antes mucho. Lo ideal es calentar un poco y comenzar la carrera con un ritmo suave y de ahí aumentarlo progresivamente.
- Hay que estirar antes de entrenar. No es lo más recomendable al tener la musculatura fría ya que podemos lesionarnos. Lo ideal es hacer un calentamiento previo y estirar una vez hemos terminado de correr.
- Come lo que quieras, si luego lo vas a quemar. No debemos abusar de dulces o alcohol, pues esto solo aporta calorías vacías y, a la hora de quemarlas, el organismo perderá otros nutrientes esenciales.
- No comas grasas, es malo. Lo cierto es que las grasas son esenciales para equilibrar nuestra dieta, siempre que sean buenas. Sí que debemos de evitar las grasas que son de mala calidad como las grasas trans y las refinadas.
- No debes beber agua mientras corres. Es importante que bebas si el cuerpo te lo pide, pues esa es la señal más clara que vas a tener de que tu cuerpo se está deshidratando.
- Evita correr con mucho frío o mucho calor. Es cierto que no es recomendable la práctica deportiva sobre todo cuando hace calor o frio extremo, pero eso no quita que te quede la opción de hacer un entrenamiento suave, exigente y corto. El frio y el calor no sirven de excusa.
- Utiliza zapatillas ligeras. Lo ideal en este caso es que utilices las zapatillas que mejor se adapten a tu manera de correr y a las necesidades de tus pies.
- Si corres sin desayunar vas a adelgazar más. Incorrecto, la Fundación Española del Corazón, afirma que sin desayunar el nivel de glucosa en sangre es menor, por lo que utilizaremos las reservas de glucógeno de nuestros músculos y nos cansaremos antes. Además, un buen desayuno es la clave para empezar bien el día.
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