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Pros y contras de los cigarrillos electrónicos

SALUD PULMONAR - 30 de abril de 2018

Los cigarrillos electrónicos se pusieron de moda hace unos años como una alternativa saludable para dejar el tabaco. Las ciudades españolas se llenaron de tiendas donde se podían adquirir diferentes tipos de vapeadores. La controversia no tardó en trasladarse a la opinión pública. ¿Ayudaban realmente a dejar de fumar? Algunos estudios decían que sí; otros, que no. Recogemos en este artículo los principales argumentos a favor y en contra de estos dispositivos.
 

A favor de los cigarrillos electrónicos

  • Más útiles que otros. La revista The Lancet publicó una investigación en la que apuntaba que los cigarrillos electrónicos resultaban más útiles que los chicles o parches de nicotina y, además, no causaban más efectos adversos.
  • Menos nocivos que los cigarrillos. Un estudio realizado en Grecia apuntaba que el uso de cigarrillos electrónicos perjudica menos a la salud que el consumo de cigarrillos convencionales. En concreto, los vapeadores incrementaban menos la presión arterial de los usuarios que los cigarrillos.
  • Menos nicotina y menos aditivos. El mercado ofrece vapeadores con más o menos nicotina lo que nos permite elegir el que se adapte mejor a nuestras necesidades para dejar de fumar. Además, la OMS apunta que en un cigarrillo convencional podemos encontrar hasta 600 aditivos, la mayoría de ellos nocivos. En un cigarrillo electrónico, apenas aparecen unas decenas y no tan perjudiciales.
  • Sin fumadores pasivos. Por último, el humo del tabaco causa daños a los fumadores pasivos, sin embargo, no hay estudios que certifiquen que los vapeadores tengan estos mismos efectos.
     

En contra de los cigarrillos electrónicos

  • No acaban con la adicción. Los cigarrillos electrónicos no acaban con la adicción, puesto que incluyen nicotina. Es necesario ir reduciendo la cantidad de nicotina de los vapeadores hasta llegar a prescindir por completo de estos dispositivos.
  • Incitan al consumo. Algunos trabajos de investigación señalan que la popularización de estos cigarrillos como artículos inocuos puede contribuir a que adolescentes y no fumadores se incorporen al hábito.
  • Sí tienen componentes tóxicos. Menos, pero los tienen. Además de nicotina, los cigarrillos electrónicos incluyen sustancias como el propilenglicol, la glicerina y otras que pueden provocar irritación de garganta y las vías respiratorias y enrojecimiento de ojos. De hecho, existen publicaciones científicas que vinculan el uso de estos dispositivos con un aumento de casos de insuficiencia pulmonar y neumonía.

¿Nuestro consejo? Lo más importante para dejar de fumar es que tomes la decisión. El método que elijas es secundario si te conduce al fin. Desde aquí, te animamos a que des el paso. ¿Por qué no intentarlo de cara al verano?

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