Cuida tu piel: alimentación y psoriasis

La psoriasis es una enfermedad crónica y no contagiosa que produce una afección inflamatoria en la piel. El síntoma más distintivo de la psoriasis es la aparición de lesiones cutáneas de diferentes tamaños. Estas lesiones son placas de piel gruesa, de color rojo debido la inflamación y dilatación de los vasos sanguíneos, y revestidas de escamas plateadas, causadas por la generación excesiva de células.

La causa de la psoriasis es un fallo del sistema inmunitario. Los glóbulos blancos, cuyo objetivo es proteger nuestro organismo de enfermedades, atacan al propio cuerpo provocando respuestas en las células como el aceleramiento de la renovación de la piel causante de la psoriasis. El diagnóstico de la psoriasis suele ser bastante claro, ya que los síntomas son muy evidentes con una simple observación. Para prevenir brotes, es aconsejable tener unos hábitos saludables, como consumir frutas y verduras, evitar alimentos grasos, reducir el alcohol, no fumar y beber mucha agua.

Saber escoger que alimentos son beneficiosos para la psoriasis es esencial para intentar reducir sus síntomas, por eso, desde Conectando Pacientes, queremos compartir con vosotros que alimentos resultan claves para mantener la psoriasis a raya y de paso mantener una alimentación saludable.

• Frutas y verduras: el consumo de alimentos ricos en betacarotenos o provitamina A, favorecen una mayor hidratación y elasticidad de la piel y ayudan a la formación y mantenimiento de las células. Dentro de las verduras, que se recomiendan consumir, como mínimo, una vez al día, las que más provitamina A contienen son los pimientos, tomates, calabaza, boniato, zanahorias, acelgas, espinacas o brócoli. Con respecto las frutas, albaricoque, níspero, melocotón, aguacate, mango, frambuesas, moras o arándanos, son tus mejores aliados para combatir la psoriasis.
• Omega 3: este ácido graso que actúa como antiinflamatorio, podrás encontrarlo en el pescado azul (caballa, salmón, sardina, trucha, etc.), marisco, aceites vegetales, frutos secos (tales como, almendras, nueces o avellanas), así como en la yema de huevo.
• Vitamina D, para ayudar a reforzar tu sistema inmunológico, es recomendable el consumo de alimentos ricos en esta vitamina que podrás encontrar en los lácteos (leche entera, yogures enteros o el queso graso como el gouda, emmental o el parmesano) o en el hígado de origen animal como por ejemplo el de ternera.