PÁRKINSON - 13 de mayo de 2018
Medicamentos, fisioterapia, logopedia…Los pacientes con Parkinson necesitan un abordaje integral en el que las terapias de apoyo están llamadas de desempeñar un papel fundamental. El objetivo es poner al alcance de las personas con Parkinson todas aquellas opciones que permitan añadir calidad de vida a su salud. Te explicamos en este artículo algunas de estas terapias complementarias.
Los pacientes con Parkinson suelen necesitar apoyo psicológico por dos razones. La propia enfermedad provoca trastornos en su estado de ánimo, pero es que además estos se pueden ver también afectados por la medicación que requieres para el control de los síntomas. La psicología les ayudará a conocer y aceptar mejor la enfermedad y a manejar síntomas como el estrés, la ansiedad, la depresión, la inhibición social o los trastornos del comportamiento.
En contra de lo que pudiera parecer, la actividad física es un aliado perfecto para los pacientes de Parkinson. La práctica de yoga por poner un ejemplo puede beneficiar a sus afectados. A través de las distintas posturas de yoga, los pacientes mejorarán su respiración y con ella la oxigenación de su cerebro; ganarán en fortaleza muscular, e incrementarán su equilibrio. Todos estos aspectos les llevarán a controlar mucho mejor algunos de los síntomas más típicos del Parkinson.
Dentro de las llamadas terapias complementarias o integrativas, la musicoterapia es una buena opción. El poder de la música resulta muy útil para las necesidades emocionales, sociales y cognitivas de los afectados. Además, la música suele acompañarse de otras actividades como la expresión corporal o técnicas instrumentales y vocales. Los pacientes logran así un mayor control de sus movimientos.
La tecnología también puede utilizarse en la enfermedad de Parkinson. Una investigación desarrollada en Estados Unidos ha demostrado que jugar con la Wii es eficaz para los pacientes que sufren esta patología. Algunas asociaciones de pacientes como la de Bizkaia han introducido ya la Wii en sus tratamientos de rehabilitación. Los pacientes aprenden a jugar virtualmente al tenis, los bolos, el aeróbic o el boxeo.
En la enfermedad de Parkinson las terapias de apoyo resultan tan esenciales como los propios tratamientos físicos. Solo con una intervención integral y personalizada el paciente podrá disfrutar de una vida plena.
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