Equinoterapia y Esclerosis Múltiple. ¿Cómo puede ayudar a los afectados?

Quizás nunca hayas oído hablar de la equitación terapéutica o de la equinoterapia. Básicamente, consiste en utilizar un caballo como instrumento terapéutico. Este método es empleado como un tratamiento complementario en personas con discapacidad, dependencia o problemas de adaptación social. También puede usarse, y con buenos resultados, en afectados por esclerosis múltiple. Te contamos algunos de sus beneficios.
 

Mejora tu estabilidad

Uno de los pilares de la equinoterapia reside en que, cuando montamos a caballo, pese a que no lo parezca, seguimos un patrón de movimiento muy similar al que tenemos cuando caminamos. Las personas con pérdida de autonomía logran de este modo y con la ayuda del animal ganar estabilidad, equilibrio y coordinación. Al mismo tiempo, el movimiento del caballo favorece el tránsito intestinal y mejora las digestiones.
 

Relaja tu musculatura

Seguro que no sabías que la temperatura corporal del caballo es ligeramente superior a la del humano. El calor que desprende el equino aumenta el flujo sanguíneo del paciente, facilita la relajación muscular, genera protección y seguridad y autoconfianza.
 

Equilibra tu mente

Montar a caballo favorece también el equilibrio emocional. Tu sensación de bienestar e interés por el mundo exterior e interior crecerán, al mismo tiempo que tu ansiedad y miedos disminuirán. La equinoterapia te permitirá disfrutar momentos de relajación y tranquilidad y fomentar las relaciones humanas.

Montar a caballo es, por lo tanto, una actividad que aporta notables beneficios para los pacientes con esclerosis múltiple. Atención, equilibrio, marcha, tono muscular, coordinación repercutirán en un mejora de la autoestima del paciente. Es el momento de probarlo. ¿Te animas?