ESCLEROSIS MÚLTIPLE - 24 de marzo de 2021
Todos hemos oído hablar de la esclerosis múltiple, sin embargo, no todos sabemos definir con exactitud en qué consiste y cómo nos afecta esta enfermedad. Según la Fundación Esclerosis Múltiple, esta patología es una enfermedad crónica neurológica, autoinmune y degenerativa que, a día de hoy, no tiene ninguna cura y se considera la segunda causa de discapacidad en occidente. Se da además la circunstancia de que es una enfermedad que afecta a una población relativamente joven, entre los 24 y los 40 años.
¿Por qué es una enfermedad degenerativa? Recientemente un grupo de investigadores del Instituto Karolinska en Suecia ha encontrado una explicación a la progresión de la enfermedad a través de un estudio que podrá resultar útil para poder realizar tratamientos en el futuro.
La esclerosis múltiple afecta a los pacientes mediante episodios que tienen una recuperación posterior. La investigación de esta enfermedad ha permitido la creación de tratamientos que disminuyen la frecuencia de los episodios, pero aún así cuando el paciente lleva más de diez años con la enfermedad los síntomas generalmente empeoran.
La investigación se ha llevado a cabo mediante el estudio con ratones con síntomas similares a los de la esclerosis. Los investigadores apreciaron que el proceso de recuperación depende de la capacidad de las células del sistema nervioso central para descomponer los restos de las células dañadas, como la mielina, capa grasa que recubre los axones cuya función es permitir que se puedan llevar a cabo los impulsos nerviosos. Durante el proceso de descomposición de células dañadas, este se vio interrumpido al eliminar el gen de la autofagia denominado Atg7.
Sin este gen, se redujo la capacidad de limpiar los residuos de tejido que se crearon por la inflamación, acumulándose a lo largo del tiempo y siendo una posible causa del progreso de la enfermedad. Según la investigación, “la trehalosa de azúcar de origen vegetal y de hongos restaura la descomposición funcional de los residuos de mielina, detiene la progresión y conduce a la recuperación de una enfermedad similar a la EM”. Los investigadores también han destacado que la edad avanzada también es un factor de riesgo en la fase progresiva de la enfermedad.
Los hallazgos en esta investigación son muy importantes para los pacientes que padecen este tipo de enfermedad, pues una reversión o al menos un mantenimiento de esta sin que se agrave implica una mejoría en la calidad de vida, sobre todo, cuándo este tipo de enfermedad tiene mayor incidencia en pacientes jóvenes.
La ciencia y la investigación es fundamental para entender cómo se comporta esta enfermedad y de qué manera se puede innovar para mejorar el pronóstico de la esclerosis.
FUENTES:
Redactado por:
Conectando Pacientes