¿Cómo paliar el déficit de hierro en pacientes con la enfermedad de Crohn?

El hierro es un mineral fundamental para la vida. Su presencia en la sangre cumple un papel decisivo para transportar oxígeno a las células y mantener nuestro cuerpo activo y sano. Sin embargo, los pacientes con enfermedad de Crohn padecen a menudo deficiencias de hierro, por eso es tan importante que, si sufres esta patología, conozcas algo más sobre la relación entre el déficit de hierro y la enfermedad de Crohn.

El Crohn es una dolencia inflamatoria intestinal que puede provocar hemorragias y sangrado en las heces. Es por eso que los pacientes de Crohn suelen padecer pérdidas de hierro con bastante frecuencia, lo que, si no se trata a tiempo, puede derivar en anemia.

Antes de explicarte qué se puede hacer, es bueno que conozcas cómo diagnosticar la pérdida de hierro. La mayor parte de este mineral se almacena en los glóbulos rojos, en concreto, en la hemoglobina. Un simple análisis de sangre podrá determinar si los niveles de hemoglobina apuntan un riesgo de sufrir una anemia ferropénica.
 

¿Qué hacer si los niveles no son normales?

Lo primero es no preocuparse, sino ocuparse. Existen varias opciones para recuperar los niveles de hierro en sangre óptimos. Si el déficit de este mineral no es demasiado importante y no aparecen diarreas, bastará con recurrir a una dieta rica en hierro y/o utilizar fuentes suplementarias. Son alimentos ricos en hierro algunas verduras y las carnes. Lo que debes saber es que el hierro que procede de las carnes se absorbe mejor que el de los vegetales, por eso algunos vegetarianos tienen déficit de este mineral. El consumo de alimentos ricos en vitamina C contribuye, sin embargo, a mejorar la absorción del hierro.

Si los cambios de dieta no bastan, tu médico o nutricionista puede recomendarte suplementos de hierro, que se ingieren cómodamente en distintos formatos, la mayoría orales. Solo si la anemia está causada por pérdidas de sangre abundante, será necesario recurrir a inyecciones de hierro o transfusiones de sangre, pero no es lo habitual.

La enfermedad de Crohn es una patología crónica con la que, con un poco de cuidado, se puede convivir con normalidad. Lo sabes bien si te encuentras entre los afectados. Nuestro consejo es que cuides tu dieta y mantengas los síntomas del Crohn a raya. Te animamos a que lo intentes.