¿Qué es la alergia al anisakis, cómo se diagnostica y cómo se trata?

El anisakis simplex, el gusano que parasita muchos pescados, puede dar lugar en los seres humanos a dos tipos de manifestaciones clínicas diferentes: síntomas digestivos causados por parasitación, lo que médicamente se conoce como anisakiasis, y malestar general o alteraciones cutáneas, provocadas por una reacción alérgica a la larva. Tradicionalmente, se habla mucho de la parasitación y muy poco de la alergia. En este artículo, te invitamos a qué conozcas un poco más a fondo qué es la alergia por anisakis, qué síntomas produce, cómo se diagnostica y cómo se puede tratar.
 

Diagnóstico y síntomas

Algunos pacientes acuden a consulta médica con manifestaciones clínicas en la piel, en forma de urticaria o angioedema, que suelen aparecer horas después de haber consumido pescado crudo. Lo curioso es que estos pacientes han ingerido en otras ocasiones el mismo tipo de pescado sin que se produzcan síntomas. Ante esta situación, es necesario sospechar que las reacciones cutáneas pueden estar motivadas por una alergia al anisakis. Tu alergólogo será entonces el encargado de confirmar o descartar si esta es la causa. Para ello, deberá realizarte un estudio completo, que incluirá una prueba cutánea en prick o test de alergia y la determinación de IgE contra el anisakis, anticuerpos que provocan la reacción.
 

Tratamiento y prevención

El tratamiento es muy similar al que se utiliza para abordar otras alergias. Antihistamínicos, corticoesteroides y, en los casos más graves, adrenalina intramuscular son suficientes para acabar con los síntomas. En ocasiones, el tratamiento debe ser completado con medidas más expeditivas como la extracción de la larva por vía endoscópica para evitar males mayores. Es importante, eso sí, acudir al especialista ante las primeras manifestaciones clínicas.

En todo caso, te recomendamos que sigas atentamente estos consejos para prevenir la alergia:

1. Evita comer pescado crudo o poco cocinado.
2. Congela el pescado que vayas a ingerir crudo al menos 72 horas.
3. Cocina el pescado a temperaturas superiores a 60° para asegurarte de que no hay resto de anisakis.
4. La prohibición total de consumir pescado es muy poco probable y, en todo caso, debe ser valorada por tu alergólogo.

Siguiendo estas sencillas recomendaciones, el consumo de pescado no solo no es un problema sino que es una fuente de salud. Recuerda que los pescados son ricos en nutrientes y deben formar parte de tu dieta.