HIPERTENSIÓN - 10 de noviembre de 2023
Existen infinidad de mitos alrededor de las dietas saludables para nuestro corazón o mejorar la hipertensión arterial. El tratamiento farmacológico puede ser una ayuda, pero controlar los factores de prevención es clave y determina nuestra salud. Una mala alimentación, sedentarismo y el tabaquismo son el trío que está facilitando una mala evolución de tus arterias.
Hay etapas donde es más frecuente como puede ser el embarazo donde se conoce como preeclampsia. Si quieres saber más sobre cómo gestionarla o prevenirla en esa etapa, te recomendamos pedir ayuda a profesionales sanitarios expertos en esta etapa ya que requiere un abordaje más específico para la salud de la madre y el bebé.
En lo primero que quizás pensemos es en retirar la sal y vamos a hacer hincapié en que el problema no reside en la sal de mesa sino en todos los alimentos que conllevan altas cantidades de sal. Entre ellos, se encuentran los snacks y patatas, embutidos y quesos, caldos concentrados, aceitunas, ahumados, salsas elaboradas fuera de casa, enlatados o edulcorantes a base de sodio como el ciclamato de sodio. Si eres de los que, en casa para cocinar hecha mucha sal, puedes optar por aumentar el sabor con especias como orégano, pimienta, albahaca, curry, perejil, ajo, cebolla o nuez moscada, entre otros.
Beber suficiente agua y moverse ayuda a una adecuada circulación sanguínea donde además de bajar la sal o sodio, deberemos potenciar el potasio. Este mineral se encuentra en legumbres, frutas deshidratadas, frutos secos, cereales y frutas. De mayor a menor cantidad según mencionado. También si notamos retención de líquidos, potenciar en la dieta alimentos con propiedades diuréticas o drenantes como el hinojo, perejil, cebolla, piña, apio y los espárragos al igual que las infusiones de cola de caballo pueden resultar muy útiles.
Al igual de importante es esta recomendación como llevar a cabo una dieta cardiosaludable en la que se potencian frutas y verduras de colores por su variedad de antioxidantes y micronutrientes todos los días 5 raciones, legumbres 3 veces a la semana como lentejas, garbanzos, judías…, grasas saludables con su omega 3 como huevos, aceite de oliva, semillas, frutos secos, aguacate y pescados azules; cereales integrales y evitar todas las harinas refinadas ya que la fibra ayuda a la salud cardiovascular y proteína de calidad en todas las comida.
La hipertensión está relacionada con la obesidad, una ingesta excesiva de grasas saturadas y harinas refinadas, sedentarismo, tabaco y alcohol. Por ello, es igual de recomendable mejorar o cambiar los hábitos más dañinos como potenciar los beneficiosos. Ve haciendo cambios poco a poco, desde la flexibilidad y con foco en sostenibilidad.
A pesar de que tomes medicamentos, el ESTILO DE VIDA es el que determina tu tensión arterial. Cuídate para prevenir accidentes cardiovasculares y cuidar de los que te rodean.
Redactado por:
Mireia Elías Fernández
Dietista-Nutricionista Col.MAD00190 y fundadora de Alimentación 3S.