Epilepsia: ¿se pueden tomar bebidas energéticas, estimulantes o cafeína?

Uno de los factores más relevantes en personas que padecen epilepsia es lidiar con las convulsiones con las que viven. Hay factores que pueden desencadenar mayor número de convulsiones y que deben reducirse al igual que es clave alinear los tratamientos terapéuticos buscando mejorar la calidad de vida teniendo en cuenta este síntoma tan frecuente y desagradable.

Una de las grandes dudas es cómo influyen la ingesta de cafeína o estimulantes energéticas en las convulsiones o qué relación hay y qué dosis se podrían tomar.

En primer lugar, la cafeína es un estimulante del sistema nervioso por lo que es coherente y tiene sentido que se relacione con esas convulsiones. Aunque la relación no es clara, se ha visto que aquellos pacientes que toman más de 3 tazas al día podrían sufrir mayor número de crisis epilépticas. Por ello, se recomienda, tomar entre 1 a 3 tazas de café diarias siendo una mejor que tres.

En cuanto a las bebidas energéticas, las cuales además de contener cafeína, llevan otras sustancias excitantes como la taurina o suplementos herbales. No están recomendadas porque también se relacionan, en mayor medida con esas convulsiones o crisis.

También pueden contener cafeína los tés o el chocolate por lo que deberíamos regular la cantidad total de cafeína diaria teniendo en cuenta todas las bebidas o alimentos. En esta tabla, se pueden ver diferentes ejemplos:

• Café: 45mg/100ml
• Bebida energética: 32mg/100ml
• Té: 20,5mg/100ml
• Refresco con cafeína: 10-12mg/100ml
• Chocolate negro: 50mg/100g

Respecto al café, podemos concretar que la cantidad de cafeína depende de varios factores, entre ellos la variedad. La arábica (el más consumido en España) tiene un 1.5% de cafeína; la robusta entre 2.4%-3%; la etíope sólo tiene un 1.13% y la de Tanzania, un 1.42%. También, esta cantidad de cafeína va a depender del tueste ya que los granos del café oscuro necesitan ser tostados durante más tiempo y ahí pierden parte de la dosis de cafeína. Para tener una taza fuerte habría que tostar entre 195-205˚C. El molido también influye: cuanto más fino y molido sea, mayor contenido de cafeína. Y, por último, hay que tener en cuenta la forma y tiempo en el que se infusiona el agua con el café ya que cuanto más tiempo pase en contacto el agua con el café, menor contenido de cafeína tendrá.

Además de estas bebidas o alimentos, deberemos vigilar todas aquellas sustancias más novedosas que van surgiendo en el mercado como es el caso de la ashwagandha ya que también excitan el sistema nervioso y podrían ser causantes de la frecuencia o la fuerza de esas crisis. Todavía falta mucha evidencia científica para saber con seguridad qué respuesta, beneficios y consecuencias hay detrás de ellas.

No obstante, las pautas recomendadas en este artículo son generales y cada caso y persona puede requerir un ajuste de esas pautas de forma más específica según medicación o gravedad, entre otros.