La falta de sueño en la adolescencia podría aumentar el riesgo de desarrollar esclerosis múltiple

Los adolescentes que duermen mal tienen más probabilidades de desarrollar esclerosis múltiple según científicos del Instituto Karolinska. Los adolescentes y niños, explican los pediatras y neurólogos, tienen la percepción de que dormir es una pérdida de tiempo. Por estos motivos, inciden en que se debe educar a los menores en que dormir es ganar salud. Puntualizan que, al igual que antes se pensaba que comer mal no influía apenas en el organismo, ahora cada vez más y más se va tomando conciencia en cuidar el sueño, principalmente entre los más pequeños. La falta de sueño en la adolescencia se vincula con:

• Problemas para mantener la atención
• Baja autoestima
• Mayores probabilidades de padecer depresión
• Peor rendimiento escolar
• Mal humor
• Malos hábitos alimenticios, que pueden derivar en obesidad

Actualmente los expertos explican que, debido a las redes sociales, muchas personas duermen menos de lo que deberían. Las plataformas de streaming, medios de comunicación, RR. SS… basan su modelo de negocio en el número de horas que pasamos delante de ellas, puesto que estas compañías pierden dinero cuanto más duermes, ya que no estas conectado. Esto está afectando, especialmente en la calidad de sueño de los niños quienes son más influenciables. Los médicos afirman que un adolescente debería dormir entre 8 y 10 horas y un adulto debería dormir por lo menos, un mínimo de 7 horas. Horas que, debido a estas causas, no se están cumpliendo.

Recientemente, un estudio desarrollado por los investigadores del Instituto Karolinska observó que una mala calidad del sueño aumenta ligeramente las probabilidades de padecer esclerosis múltiple. La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmunitaria que afecta a la médula espinal y al cerebro. Los investigadores concluyen que este aumento puede producirse por una mala regulación de la respuesta inmunitaria, provocada por el estrés crónico que causa dormir mal. Las causas por las que se desarrolla esta enfermedad neurológica que incide principalmente en personas jóvenes y en mujeres, se desconocen, pero además de un mal sueño, existen otros factores de riesgo que aumentan las probabilidades de que se desarrolle. Por ejemplo:

• Falta de vitamina D
• Mala alimentación
• Obesidad infantil
• Consumo de tabaco
• El virus Epstein-Barr

Celia Oreja-Guevara, jefa de Sección de Neurología y coordinadora de la Unidad de Esclerosis Múltiple en el Hospital Clínico San Carlos, puntualiza que para que los resultados tengan una mayor veracidad se debería repetir el estudio en otras poblaciones puesto que el realizado por el Instituto Karolinska se basa solo en el registro sueco. Cada país tiene sus propias costumbres y hábitos, lo que afecta a la calidad del sueño.

Promover conductas saludables entre los jóvenes en los colegios debería considerarse igual de importante que aprender otras disciplinas académicas. Los expertos explican que el deporte es una muy buena alternativa para disminuir la falta de sueño. Realizar actividades físicas ayudan a conciliar el sueño, a socializar y a reducir las horas navegando en las redes. Por otro lado, manifiestan que es aconsejable establecer límites en el uso de dispositivos tecnológicos y retrasar la compra del primer móvil.

Fuentes:

• Åkerstedt T et al. Insufficient sleep during adolescence and risk of multiple sclerosis: results from a Swedish case-control study. J Neurol Neurosurg Psychiatry.doi:10.1136/jnnp-2022- 330123
• https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000872.htm#:~:text=Al%20igual%20que%20los%20adultos,el%20desempe%C3%B1o%20escolar%20y%20calificaciones