ALERGIA - 10 de junio de 2022
La anafilaxia es la manifestación alérgica generalizada más grave que existe. Se produce cuando unas células llamadas mastocitos y basófilos liberan de una manera explosiva sustancias que provocan los síntomas típicos de una reacción alérgica. Habitualmente suele manifestarse en pocos minutos mediante síntomas en la piel, y, además, afecta a otros órganos. Para que una reacción alérgica pueda ser considerada una anafilaxia ha de afectar a dos o más sistemas del organismo. Puede causar síntomas cardiovasculares, con caída de tensión y pérdida de conocimiento, y respiratorios, como el ahogo. En los peores casos puede ser fatal y producir la muerte del paciente, sobre todo si no se actúa rápidamente. La anafilaxia más grave se denomina choque (shock) anafiláctico y sucede cuando hay una bajada de tensión junto a una afectación cardiovascular.
Es una enfermedad inusual y rara vez mortal. De cada 100.000 personas, afecta únicamente a entre 3 y 30 individuos, aunque su prevalencia en niños en España se está acentuando. La mortalidad es de menos del 2%, aunque sube hasta el 6,5% si se trata de un shock anafiláctico.
Los alérgenos que pueden ocasionar una anafilaxia son productos cotidianos e inofensivos para la mayoría de las personas no alérgicas. Las causas más habituales de la anafilaxia son:
Tras la exposición al alérgeno, los síntomas afloran en minutos o pocas horas, de manera aguda y sin una duración fija. Los síntomas más frecuentes son los cutáneos, como enrojecimiento, picor, hinchazón o urticaria. También es normal que se vea afectado el tracto respiratorio, con congestión y picor, estornudos, variación de la voz, presión en la garganta o dificultad para tragar. Si los bronquios se ven afectados, puede llegar a producir una crisis asmática. Las afectaciones que pueden surgir en el sistema digestivo son vómitos, náuseas, dolor abdominal o diarreas.
En el momento en el que está ocurriendo la anafilaxia, no se puede confirmar su diagnóstico. Este se realiza por los síntomas que tiene el paciente tras haber estado en contacto con un alérgeno conocido o no. Un marcador útil para confirmar este diagnóstico es la triptasa sérica. El tratamiento debe comenzarse de manera inminente en caso de que se sospeche que se ha sufrido anafilaxia.
Y recuerda que, si tienes cualquier duda sobre alergia, puedes preguntar al experto de la web tengoalergia.es.
Fuentes:
Redactado por:
Conectando Pacientes