ESCLEROSIS LATERAL - 16 de enero de 2025
La relación entre el daño muscular derivado del ejercicio y el riesgo de padecer Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) es objeto de debate por la comunidad científica desde hace varios años, pero un reciente metaanálisis1 ha llegado a la conclusión de que existe una correlación entre la participación en actividades físicas intensas y un mayor riesgo de desarrollar ELA. Los datos sugieren que individuos involucrados en ejercicios extenuantes, como los deportistas de élite, podrían tener una probabilidad incrementada de padecer la enfermedad. Aunque el metaanálisis no establece los mecanismos específicos, los investigadores postulan varias hipótesis para explicar esta relación.
Una de ellas es el estrés oxidativo, que daña las células, incluyendo las neuronas motoras, y que puede ser desencadenado con la actividad física intensa. Otra posible explicación son los microtraumas repetitivos que se producen con el ejercicio continuado y que pueden contribuir a la degeneración neuromuscular. En cualquier caso, no hay una relación directa y pueden ser otros factores los que se den a la vez y no por una relación causa efecto. Los autores del análisis también apuntan que es posible que individuos con una susceptibilidad genética a la ELA sean más vulnerables a los efectos negativos del ejercicio intenso.
Los deportes de contacto, que unen actividad física de alta intensidad y lesiones repetitivas de la columna cervical y la cabeza, son posibles factores de riesgo para la ELA, según un trabajo anterior publicado en Epidemiology2. Analizaron deportistas varones de boxeo, hockey, fútbol y rugby y hallaron una relación entre la práctica de deportes de contacto y la ELA, con un 76% más de probabilidades de un diagnóstico de ELA. Este riesgo era mayor con la edad y con la exposición al tabaco.
Sin embargo, no está claro que ese riesgo sea por el impacto repetitivo en la cabeza y no en los músculos, por ejemplo. Una revisión de estudios publicada en British Journal of Sports Medicine3 analizó si los microtraumas cerebrales podían ocasionar enfermedades neurológicas como la ELA. Los investigadores señalaron que “algunos estudios en ex atletas profesionales sugieren un mayor riesgo de trastornos neurológicos como ELA y demencia” si bien no encontraron ninguna evidencia que relacione los impactos repetitivos en la cabeza con enfermedades neurológicas.
La ELA es una enfermedad neurodegenerativa compleja en la que influyen factores genéticos, ambientales y relacionados con el estilo de vida4. En el ámbito genético, mutaciones en genes como SOD1 (relacionado con el estrés oxidativo), C9orf72, TARDBP y FUS están asociadas con casos familiares, mientras que un historial familiar de ELA o demencia frontotemporal también incrementa el riesgo. Entre los factores ambientales, la exposición a toxinas como pesticidas y metales pesados, el consumo de tabaco y, posiblemente, infecciones virales, han sido implicados como desencadenantes potenciales. En cuanto al estilo de vida, además del ejercicio físico intenso y los traumatismos repetitivos podrían contribuir al riesgo en individuos predispuestos genéticamente. Deficiencias nutricionales, como bajos niveles de antioxidantes y ácidos grasos omega-3, también pueden aumentar la vulnerabilidad a la neurodegeneración. A nivel biológico, procesos como el estrés oxidativo, la inflamación crónica y las alteraciones en el metabolismo energético, que también tienen relación con el daño muscular, están implicados en la progresión de la enfermedad. En conjunto, la interacción entre predisposición genética y factores ambientales sugiere que la ELA es una enfermedad multifactorial en la que no puede establecerse una asociación directa con el daño muscular.
Los factores de riesgo para ELA son multifactoriales, y su interacción compleja entre predisposición genética y factores ambientales, como el ejercicio intenso y los microtraumatismos contribuye al desarrollo de la enfermedad. Cómo se relacionan esos factores de riesgo con la carga genética y si hay más probabilidad en individuos predispuestos es algo que futuros estudios tienen que dilucidar.
Bibliografía consultada
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