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Consejos para realizar ejercicio físico si padeces diabetes y prevenir complicaciones

DIABETES - 15 de septiembre de 2024

La diabetes es una condición que requiere una gestión constante para mantener niveles adecuados de glucemia y prevenir complicaciones. La actividad física es una herramienta poderosa en el manejo de la diabetes, ya que no solo ayuda a controlar la glucemia, sino que también mejora la salud cardiovascular y la calidad de vida en general. Sin embargo, es crucial seguir ciertas indicaciones para minimizar los riesgos asociados con el ejercicio físico en personas con diabetes.

Beneficios del ejercicio físico en diabetes

  1. Mejora del control de la glucemia. El ejercicio regular ayuda a los músculos a utilizar la glucosa como fuente de energía, lo que reduce los niveles de azúcar en sangre. Esto es especialmente beneficioso para las personas con diabetes tipo 2, donde la sensibilidad a la insulina suele estar reducida.

  2. Salud cardiovascular. Las personas con diabetes tienen un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares. El ejercicio físico, especialmente las actividades aeróbicas como caminar, correr o nadar, fortalece el corazón y mejora la circulación sanguínea, reduciendo el riesgo de infartos y accidentes cerebrovasculares.

  3. Calidad de vida. La actividad física no solo mejora la condición física, sino que también tiene efectos positivos en el estado de ánimo y la salud mental. El ejercicio libera endorfinas, lo que puede reducir los síntomas de depresión y ansiedad, comunes en personas con enfermedades crónicas1.

Indicaciones para realizar ejercicio con diabetes

  1. Consultar con el médico. Antes de comenzar cualquier programa de ejercicios, es fundamental consultar con un profesional de la salud para evaluar tu estado físico y recibir recomendaciones personalizadas.

  2. Monitorear la glucemia. Es importante medir los niveles de glucosa en sangre antes, durante y después del ejercicio para evitar episodios de hipoglucemia. Lleva siempre contigo carbohidratos de acción rápida, como zumos o tabletas de glucosa, en caso de que tus niveles de azúcar en sangre bajen demasiado.

  3. Elegir el tipo de ejercicio adecuado. Opta por actividades que disfrutes y que se adapten a tu condición física. Los ejercicios aeróbicos, de resistencia y de flexibilidad son excelentes opciones. La combinación de estos tipos de ejercicios puede ofrecer beneficios integrales para la salud.

  4. Hidratarse adecuadamente. La deshidratación puede afectar los niveles de glucosa en sangre. Bebe suficiente agua antes, durante y después del ejercicio.

  5. Uso de calzado adecuado. Las personas con diabetes deben prestar especial atención a sus pies, ya que son más propensas a infecciones y úlceras. Usa calzado adecuado que proteja y soporte bien tus pies2.

  6. Reconocer los signos de hipoglucemia e hiperglucemia. Es crucial conocer los síntomas de niveles bajos y altos de glucosa en sangre. Si experimentas mareos, sudoración excesiva, confusión o palpitaciones, detén el ejercicio y revisa tus niveles de glucemia3.

El ejercicio regular ayuda a mantener la movilidad articular y a prevenir condiciones graves asociadas con la diabetes, como el síndrome del túnel carpiano y el pie diabético. Además, el papel del fisioterapeuta es crucial para guiar a los pacientes en la elección de ejercicios seguros y efectivos, mejorando así su calidad de vida4.

En suma, el ejercicio físico es una parte esencial del manejo de la diabetes. Con los cuidados adecuados y la supervisión médica, puedes disfrutar de sus numerosos beneficios mientras minimizas los riesgos. La clave está en la moderación, la consistencia y la atención a las señales de tu cuerpo.


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