Por qué y cómo cuidar la microbiota oral

¿Sabías que el mal aliento resulta de la fermentación de las bacterias que existen en tu boca, produciendo compuestos sulfurados, que generan mal olor y malestar bucal? ¿Sabías que la microbiota oral influye en tu salud global? ¿Y que la salud digestiva empieza en la boca?

Una buena higiene bucodental es el primer paso para mejorar la microbiota de la zona, es decir, mantener un equilibrio adecuado de las bacterias que habitan en ella. Nuestra microbiota oral es distinta a la intestinal o la vaginal por lo que las recomendaciones van a ser diferentes.

Esta microbiota oral constituye una importante barrera de defensa haciendo una limpieza de patógenos produciendo una cantidad y calidad de saliva adecuada. Por ello, si hay inflamación periodontal, hay que acudir al dentista, ya que se relaciona con el sobrecrecimiento de microorganismos productores de metano.

¿Cómo cuidar esa microbiota oral y mantener un adecuado equilibrio?

• Se recomienda un buen cepillado y enjuagues con aceite de coco.

• Evitar tomar chicles constantemente además de caramelos o pastillas de sabores, lejos de mejorar el aliento, se van a cargar esa microbiota oral. No se recomiendan porque llevan edulcorantes acabados en -ol como poliol, maltitol, xilitol… que generan este daño.

• También hay otros productos con estos edulcorantes como el chocolate sin azúcar, bebidas carbonatadas cero azúcar, light, entre otros. Mirar etiquetas, aparecen en los ingredientes.

• Reducir consumo de lácteos ya que se asocian con peor microbiota oral. No hace falta eliminarlos, pero no se requieren esas 3 raciones que se siguen recomendando sin necesidad.

• Revisar medicamentos y sus interacciones entre ellos o con suplementos nutricionales.

• Prevenir deshidratación: beber cada poco tiempo agua, tés o infusiones y no hidratarse con otras bebidas como zumos y refrescos.

• Mantener una higiene oral constante, limpieza de 3-5 veces diarias.

• Evitar los picoteos constantes ya que justo en ellos no hacemos la limpieza bucodental a posteriori. Realiza las tomas que necesites de 3-5 al día intentando dejar 3-4hrs entre tomas y realizando esa limpieza en cada una de ellas.

• Procura llevar una dieta variada y equilibrada evitando azúcares, harinas refinadas y grasas de baja calidad. Más concretamente, potenciar el consumo de alimentos ricos en zinc como los huevos, mariscos, semillas de calabaza, lomo de cerdo, arroz integral...

• Prueba a masticar menta, hierbabuena o clavo natural.

• El estrés crónico reduce la producción de saliva y cambia su composición. Cuida tu salud mental.

Como puedes observar hay una larga lista de cosas que podemos hacer para mejorar, cuidar y prevenir nuestra salud bucal. Tanto si cursas con problemas como si no, te recomendamos fuertemente cuidarla.